El docente se enfrenta al difícil reto de abandonar la zona de confort y romper los viejos paradigmas en torno a la inclusión de nuevas tecnologías de la información en los procesos de enseñanza – aprendizaje. El concepto de brecha digital, utilizado para denominar la distancia, en las oportunidades de desarrollo, entre los países que tenían acceso a estas tecnologías y los que no, ha quedado lejos debido a los avances y logros alcanzados por las diferentes políticas públicas implementadas y por el desarrollo de tecnologías más accesibles a usuarios. Las estrategias Tic, son motivo de constante estudio en diferentes sectores pero con especial énfasis en la educación, ya que la brecha digital ya no está dada por el acceso sino por el uso que se le da a estas, el nivel de apropiación y el aprovechamiento de las múltiples herramientas.

Si bien se ha mejorado el acceso, el uso de nuevas tecnologías aún es limitado y muy polémico para el modelo educativo tradicional que ostentamos. Las nuevas tecnologías irrumpieron con toda su fuerza en el ejercicio docente, provocando un desequilibrio en el quehacer pedagógico y exigiendo que la dinámica propia se viera forzada a realizar ajustes, desaprender y aprender de nuevo y planificar de acuerdo a la nueva realidad. El rechazo fue instantáneo. Fueron satanizadas por el simple hecho de poner en riesgo la estabilidad pedagógica de un modelo cerrado que limitaba el acceso a la educación en un claro fenómeno expansivo del conocimiento.

Atento a que todo gran cambio conlleva su tiempo de implementación, lentamente fueron ganando espacio, teniendo al alumnado como su aliado más fuerte, aunque son contadas las experiencias donde las netbooks o tablets son utilizadas a los fines de diseñar y/o parametrizar nuevas realidades.

Estas nuevas tecnologías, muy por el contrario, son implementadas como fuente consultiva de información, al solo fin de utilizarlas como mecánicas informáticas de obtención de la información, lo que a la postre induce al viejo “libro” como fuente del saber ya establecido.

Las herramientas tecnológicas dentro del aula, no constituyen un fin en sí mismo, pero si un medio determinante para motivar al alumno, al involucrarlo en el proceso de aprendizaje. Existiendo un buen manejo de las mismas, la labor del docente se ve perfeccionada, atento a que todo su esfuerzo pedagógico se ve direccionado a la transformación del conocimiento adquirido en la forma de un guía. Estas nuevas implementaciones tecnológicas son una escalada dentro de la adquisición de nuevos conocimientos y sus interrelaciones, tanto para el docente como para el alumno en el proceso de aprendizaje.

Una iniciativa pedagógica exitosa no es tecno céntrica, muy por el contrario, el centro no debería ser ocupado centralmente por la computadora, como tampoco lo fue en su debido tiempo, la implementa- “Lenguaje Inclusivo: La novedad idiomática de las sociedades no inclusivas y, por lo tanto, excluyentes” Van Lanker, Patricia Paola Beatriz. D.N.I.: 28.329.294 Nivel Primario Adultos y adolescentes 11 ción del uso de la tiza y el pizarrón, sino el niño, como centro de adquisición de nuevos conocimientos y la reconversión de los mismos en un claro intercambio entre lo netamente humano y lo específicamente científico.

Sus aspectos, tanto emocionales como cognitivos, creativos y sociales, son parte esencial de la formación tecnológica del docente y la condición necesaria y suficiente para el éxito proyectado.

Es condición sine qua non, que el docente venza temores injustificados aprendiendo a considerar estas nuevas tecnologías como un recurso más de los disponibles y utilizables durante el proceso de aprendizaje. Entendiendo a estas como un aliado que permitirá hacer más atractivo la difícil tarea de divulgación del conocimiento. La tecnología a nuestro favor.

El comportamiento social que se ha desarrollado alrededor de la tecnología es una realidad inexorable induciendo al sistema educativo a adaptarse e incluir nuevas prácticas que ayuden a captar la atención en las aulas. “…las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) pueden contribuir al acceso universal a la educación, la igualdad en la instrucción, el ejercicio de la enseñanza y el aprendizaje de calidad y el desarrollo profesional de los docentes, así como a la gestión dirección y administración más eficientes del sistema educativo” Unesco.

Entendiendo esta docente que el agua contenida en un estanque, sin intercambio ni movimientos, está condenada a su propia descomposición, de forma análoga continuar detenidos en un tiempo que ya fue, desde lo pedagógicamente implementable nos conducirá irreductiblemente a posicionar al educando fuera del contexto en un futuro que le espera de manera cercana. Siendo el gran desafío la formación constante y la actualización permanente de acuerdo a los vertiginosos tiempos que vivimos.

Van Lanker, Patricia Paola Beatriz.

D.N.I.: 28.329.294

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